Es una técnica tradicional milenaria que se practica en la Medicina Tradicional China desde hace miles de años.
Las ventosas se han fabricado a lo largo del tiempo por varios materiales como el bambú, la concha, el vidrio o el plástico.
La ventosa o copa funciona generando un vacío de aire en la zona a tratar. Existen dos maneras para generar este vacío:
- Ventosa con fuego: se aplica una llama en el interior de la ventosa colocándola inmediatamente en la zona a tratar. En este caso el tratamiento se realizará con ventosa de vidrio.
- Ventosa por succión: en este caso se genera el vacío una vez la ventosa colocada sobre la piel. Este método requiere ventosa de plástico con válvula y la succión se realiza bombeando el aire con una pistola especial.
Anteriormente se habrá realizado el diagnóstico y se habrá seleccionado los puntos de acupuntura a tratar o se habrá atendido a la tensión muscular (ya que tiene un efecto relajante muscular) y/o a las áreas afectadas. El tratamiento se puede realizar de dos maneras o con ventosa móvil que consiste en deslizar la ventosa a lo largo de la zona a tratar o con ventosa fija que consiste en dejar las ventosas entre cinco y quince minutos según el tratamiento requerido para este efecto.
La ventosa trata diversas afecciones y enfermedades
Esta práctica terapéutica consiste en crear succión que ayuda a aumentar el flujo sanguíneo, eliminar las toxinas de la sangre, favorecer la linfa y la liberación miofascial, reducir la inflamación y el dolor para tratar diversas afecciones y enfermedades.
Además de tener resultados para contracturas musculares, el tratamiento de ventosa también ha demostrado resultados en enfermedades como la artritis o la fibromialgia.
En la Clínica de Medicina China CM, el tratamiento de ventosas puede perfectamente asociarse con las otras terapias de la Medicina Tradicional China como la Acupuntura, la Moxibustión u otras.
El profesional de salud decidirá el tratamiento más adecuado según el síndrome presentado en clínica.